Hace unos cuantos meses escribía esta historia tan graciosa y tan bien contada:

"Historia muy graciosa y muy bien contada por Poo"

La historia tiene una continuación, el cordoncito azul siguió en la defensa para que ésta no se petateara, todos éramos muy felices: la defensa, el cochino verde bonito y una servisora. Hasta que una noche de invierno, de lluvia intensa, unos malvados decidieron llevarse la defensa y los limpiaparabrisas delanteros del cochiño, SÍ, los limpiaparabrisas.

Desolada fui a hacer una denuncia y el seguro se hizo cargo de los gastos, la policía científica no pudo coger huellas porque había llovido. Nadie pudo meter entre rejas a los malvados que deshicieron mi gran obra.

Meses después todo ha vuelto a la normalidad y no he vuelto a quitar accidentalmente la defensa del coche, pero tengo que pensar en poner en mi muñeca un nuevo cordoncito estilo cool por si me hace falta para cualquier apaño.

Hoy es la noche de San Juan y estoy en mi casa haciendo la maleta, con una bolsa en la cabeza para que la mascarilla del pelo haga buen efecto.

Felices vacaciones, me voy de Cumbre.

:D

Enfermedad...

Señoras y señores, encontré una página en la Internete en la que puedo ver las telenovelas que yo quiera, cuando quiera, como soy súper mala no os pienso decir la página en cuestión porque es mía, ES MÍA.

Ahora estoy viendo "Contrato de Amor", geeeeeeeeeeenial, pero si hablamos de cosas rechulas y molonguis tenemos que hablar de "Piel de Otoño" con la maravillosa Laura Flores, genial, genial y genial.

Por si no lo saben, las mejores telenovelas son las mexicanas, SIEMPRE, siempre las mexicanas.

Me odio a mí misma por no haber inventado yo misma la aplicación del facebúc de "Y tú, ¿qué insulto de telenovela eres?". No obstante, no sólo hay insultos geniales, hay frases súper geniales. Una de las últimas que escuché, y fue en "Piel de Otoño", fue :"Chamaco, no quieras voltear la torta a tu favor". MA- RA- VI- LLO- SO.

Ay, algún día lo dejaré todo y me iré a México a triunfar como actriz de telenovela.

Novedades laboriles...

Estoy muy feliz, mucho, mucho, a resulta de que llevo dos semanas negociando con una famosa editorial la posibilidad de hacer unos manuales para una cosa rara que va a hacer el Estado en temas de educación. La editorial no publica temarios, publican manuales con formato de libro, muy genial y muy molongui todo este mundo que hace que me quede con la boca abierta en más de una ocasión.

Se supone que los manuales llevarán mi nombre, pero la editorial se reserva el poder poner mi nombre en la portada.

Mucha emoción y muchas cosas que hacer.

El lunes firmo el contrato, ya lo tengo en mi poder y tengo que releerlo detenidamente, otra vez, además en él hay algo terrible llamado "fechas de entrega" un invento de Satán que hará que se me note el corazón con ropa ajustada.

Espero que esto sea el inicio de una época de cambios y una puerta para futuras cosas chachis, seré pobre, pero con una manual en el que esté puesto claramente mi nombre, bueno, si la editorial lo estima oportuno.

¡Gracias Facebúc!

Como el facebúc lo carga el diablo y yo tengo mucho tiempo libre, pues me puse a ver las fotos de un chico que tengo como amiguito y con el que nunca hablo, este chico tiene como amiguito a mi primer amor no correspondido, ese ser que me dijo hace 14 años que en el 2010 se casaría conmigo...

Verdaderamente rezo para que no se acuerde porque una de las cosas que más reconfortan en esta vida es ver cómo ha cambiado y que ya no puede verme por encima del hombre porque él era guapo y yo no, ahora ninguno de los dos somos guapos y veo a AEP, con todas sus cualidades, y pienso: "Soy una suertuda".

Cambiando un poco de tema, otra de las cosas que me reconfortan mil, más que meterme en una cama con unas sábanas recién puestas, es ver como la gente delgada se vuelve gorda, es maravilloso contemplar las metamorfisis de gente que comía lo que le salía del tríquili, ver que ahora, engorda como cualquier ser humano.

El otro día a AEP le apretaba el pantalón, AEP está delgado, pero ya lo estuvo mucho más y los diositos saben que buena falta le hacían unos kilitos, pues se los ha dado con el consiguiente apretamiento de pantalones, pues para él era una sensación nueva sentir que unos pantalones te aprietan y para mí, señores míos, es una sensación que he vivido tantas veces....

El otro día vi a la matona del colegio y tenía un culo digno de para utilizar como portaaviones (sé que no soy la más indicada para hablar de culos grandes), pero me pareció tan bien y me reconfortó más que cuando me meto en unas sábanas con dibujitos de Winny de Pooh recién puestas.

LPVM dice que a ella le encanta ver al guaperas del instituto gordo y calvo, pues bien, a mí más que reconfortarme me pone burrísima....