Tuesday, November 30, 2010

Las canciones de nuestra vida....

Las canciones nos recuerdan momentos de nuestra vida, puedo cerrar los ojos y recordar que con tal canción morraba con nosequién o que con tal canción estaba con mi amigas cantando o estudiando o en un local determinado o con mi madre o con mi hermano o con mis primos o con mis vecinos o con mis tíos.

Gracias a mi hermano conozco los grupos de rock, es muy probable que si no tuviera hermano mayor nunca hubieses estudiado, cantado y memorizado canciones de Extermoduro o Los Suaves.

Cuando yo estaba en el Instituto me sabía el Ágila de Extremoduro mejor que las preposiciones, mis amigas no, mis amigas no tenían un hermano mayor.

También recuerdo que a mi vecina no le gustaba nada Alejandro Sanz, pues entonces, a mí también me tocaba odiarlo y lo odiaba, pero sólo a sus ojos, a mis 8 años no tenía mucha personalidad y escuchaba a escondida sus canciones.

De mi madre he heredado el amor a Juan Pardo (ay, Gallo de Pelea), a toda la música de los 40, 50 y 60, además de los clásicos de toda la vida de Dior: las Rocíos, Julio Iglesias....

De mis primos Hombres G, sí, todos lo sabeis, además recuerdo que. a veces, para dormir, mi prima me cantaba alguna canción de Los Pecos.

Y de mi abuela las canciones de toda la vida: "E pousa, pousa pousa, e non me toques naquela cousa...", "Dos rapaces de poba nunha lancha de carballoooooo", "Eu queríame casare, mira nai non teño roupa.." y más y más y más que cantamos en las fiestas señaladas.

Monday, November 22, 2010

Yo, Donna

Después de dos manuales, me queda menos de un mes para entregar mi tercer manual, los dos primeros aún no están maquetados y, en verdá, no sé cuando saldrán a la venta y no sé cuándo empezaré a cobrar.

He vuelto a comprar la Yo Donna, lo reconozco, hacía como tres años que no la compraba, el sábado pasado me entraron una ganas terribles y me fui a comprar el MUNDO porque, dentro de ella, allí, tan calladita y tan pequeñita está la Yo DONNA, pues la compré y he podido contrastar que el tiempo no ha pasado para ella, sigue con el mismo formato y con los mimso colaboradores que yo recordaba.

Total, tras esta adquisición entró en mi cuerpo una sensación maravillosa de querer escribir en ella (debemos tener en cuenta que cuando voy al banco y quiero ser cajera de banco, cuando voy la panadería quiero ser panadera y cuando voy en Taxxissss (como diría la Belén), pues quiero ser taxista, no obstante lo de ser taxista trae cola y se merece una entrada especial). Total, he decidido mandarle u mail a Charo Izquiero, la directora de Yo Donna, le voy a decir que soy súper chú y que quiero escribir en su revista. Prometo suibir el mail, al igual que prometo subir el mail que voy a enviarle a la página oficial de Isabel Pantoja pidiéndole la foto ochentera en la que yo (SÍ, YO) le entregaba un ramo de flores a la mismísima Pantoja.
Bueno, si algún director de algún suplemento o algo similar lee ésto y me quiere como colaboradora, pues qué bien.
Buenos días maldito lunes.

Otro día haré una pequeña tesis de los lunes cuando son lunes.

Tuesday, November 16, 2010

Luva pulgosa, jijijiji....

Pues resulta que Luva estuvo enfermita, después de todos los desamores que tuvo y cuando parecía que iba sentando un poquito la cabeza y que iba teniendo un poquito más de sentidiño, pues va la tronca y se empieza a encontrar mal, se pasa todo el día llorando por las esquinas y nadie sabe lo que le pasa.

-Luva, pero, ¿qué te pasa?, ¿estás deprimida por algo?.

Y Luva no contestaba, eso sí, no perdonaba sus cuatro horas de siesta matutinas y su tarrina diaria, pero estaba rara.

Ella sabía que Moliarti estaba en un cajón, destinado a ser olvidado por todo el mundo y no hacía nada por él, veía al elefante y ni se paraba a saludarlo. Luva no era Luva.

Luva lloraba por las esquinas sin consuelo.
Las personas que habitan con Luva decidieron poner el caso en manos de la mejor profesional, querían recuperar a la Luva alegre y arisca por momentos y que la Luva triste se fuera para siempre.

La doctora dijo que Luva tenía muchas pulgas, muchísimas pulgas. Luva, ¿qué has hecho para coger tantas pulgas?.

Ahora ella está bien y esperemos que haya aprendido la lección y sepa que hay métodos para prevenir el contagio de pulgas. :D

Thursday, November 04, 2010

Villa Parrosa

Ayer, como no, hubo noche de Belén Esteban, en Villa Parrosa (el lugar donde vive Poo y AEP) primero se vio el partido del Madrid, sin la bendición de Poo y después se vio el "Tengo una pregunta para usted, señora Belén Esteban".

Yo, súper fan de ver todas estas cosas, hasta me ha dado cosita, y vi como tres preguntas y puse el siempre tan recurrido "Comando actualidad" donde, gracias a mi televisión, los reporteros son obesos mórbidos.

Total, os cuento todas estas cosas para contaros que ahora vivo en Villa Parrosa, una preciosa residencia en la periferia donde todo es maravilloso. AEP (que sigue siendo mi amigo especial, aunque la Pooabuela insiste en que no ha habido pedida de mano y que éso le parece muy mal) ha encontrado trabajo en una fábrica de pollos, llevando la calidad de todo el proceso. Yo sigo con mis manuales y con mi profesión de profesora cansada.
En la próxima entrega os contaré las dificultades típicas de la conviviencia y lo importante que es tener limpia la placa de la cocina.
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