Hay muchas cosas que una no entiende y que jamás en la vida voy a entender: ¿por qué vuelan los aviones?, ¿por qué la tv es tv?, ¿por qué de una cosa redonda y plana puede salir música?...un montón de cosas que no entiendo porque no entiendo un carajo de tecnología, no me interesa y no tengo ganas de ponerme a razonar cosas que me traen al fresco, prefiero pensa que es mejor vivir en la ignorancia y cada vez que utilice uno de esos aparetejos se me llenen los ojos de chispitas pensando: ¿cómo es posible?.
Por muy raro que parezca hay algo que nunca podré comprender, que me supera, que no entiendo ( y eso que tengo una carrera...), es LA COSTURA.
Admiro a las modistas, a las costureras, a las reinas del punto de cruz, a las señoras tejedoras....pero lo que más admiro de una persona que sepa coser no es que sepa hacer patrones, que corte bien la tela, que hilvane requetebién o que sepa juntar cada trocito de tela hasta encontrar la forma de un abrigo. NO, lo que más admiro de todas esas personas es que sepan manejar una SINGER.
La Singer es la máquina más complicada que hay en el mundo, me imagino a un piloto de aviones perplejo delante de una de esas pequeñas máquinas con pedal. Deberían de obligar a todo el mundo a estudiar una ingeniería para poder utilizar una de ellas. Además, propongo al Gobierno que vuelva a impartir clases de costura en los colegios, yo no las he tenido y ahora lloro de impotencia cada vez que quiero subir uno bajos de unos pantalones. Tampoco entiendo como el señor Singer no tiene el Premio Príncipe de Asturias al mejor y más complicado inverto. ¡No lo entiendo!


Gracias Putavaga por el chaleco de putifurcia que me has hecho con tu Singer y con ese Don que Dios te ha dado. Gracias.