Saturday, October 10, 2009

Crónica de una enfermedad

El viernes pasado fue el cumpleaños de AEP, me fui a Lugo y me gasté 70 euros en marisco, sí, le regalé a AEP una mariscada romantica (que no romántica) con vino. Ese día fue todo genial, en Lugo empezaban las fiestas y salimos hasta muy tarde y llegamos a casa embriagados de amor y de licor café, con frío, tabaco y poca ropa.

El sábado fue un día de descanso, de curar la resaca, paseo y siesta. Por la noche decidimos ir a la fiesta -en otros lugares, noseporqué, es conocida como feria, no obstante yo ahora le llamo fiesta por no llamarle cochitos que es su verdadero nombre- allí pretendíamos comprar churros y ver los monólogos de los gitanos propietarios de las tómbolas. Empezó a llover, mi gargante se murió y mi estómago, con la idea de los churros, empezó a sólo querer vomitar. Me metí en cama medio muerta.

El domingo amanecí cuasimuerta, mi día se resume en mocos, vómitos y los 3 telefilms de la tarde de Antena 3. Por cierto, recomiendo uno de Melanie Grifitth estupendo, en el que ella es una malvada abogada.

El lunes también muy mal, los mocos habían pasado a un segundo plano y los vómitos eran los protagonistas, pero no podían estar sin la fiebre, no tenía termómetro para medírmela, pero AEP me dijo que en el sofá empecé a decir incoherencias con los ojos cerrados, él sabe que cuando digo incoherencias tengo los ojos bien abiertos. Fue el mismo lunes cuando me dí cuenta de que el amor que me tiene AEP es infinito. Yo le insultaba cuando me sugería ir al médico, no obstante él me sujetaba la cabeza en el water cada vez que yo vomitaba. Esa misma tarde accedí a ir al médico, fui al Hospital "Nostra Selora dos Ollos Grandes"-sinceramente, toda la enfermedad ha valido la pena sólo por descubrir el nombre tan grandioso de este hospital- allín me atendieron súper bien (¡Viva los seguros privados, sin colas, con gente chú que te morrea mientras te atiende!). La doctora me dijo que estaba bastante chunga, me dio mil medicamentos y me mando hacer una analítica al día siguiente. Al salir fuimos a la farmacia y AEP me compró un Termómetro digital (el mayor invento del mundo mundial, después de el pelapatatas), me estuve tomando la temperatura cada 10 minutos durante toda una noche y llegué hasta los 38,5º.

El martes amanecí vomitando, fui a hacer la analítica y la doctora chú me dijo que en la analítica estaba todo bien, por lo tanto no había síntomas de Gripe Mala y no hacía falta ingresar, pero que dentro de una semana volviera (me estoy plantenado volver sólo por decir que he estado en el hospital "Nostra Señora dos Ollos Grandes" otra vez), me dijo que controlara la fiebre y que si me volvía a sufir volviera de urgencias. El martes seguí vomitando.

El miércoles sólo vomité los medicamentos (que era lo único que me había metido en el cuerpo).

El jueves de vuelta a Pontepeich, dos horas conduciendo y cuatro horas y media de clase, mis alumnos me pidieron que me fuera a la cama que les daba mucha pena. El jueves no vomité.

El viernes no vomité, pero empezó la tos y otra vez la fiebre.

Hoy sábado, sólo quiero ir a comprar zapatos, pero ni mi madre ni los dioses me dan fuerzas para hacerlo. Intuyo que hoy habrá sesión de telefilms, lo cual me hace enormemente feliz.

Cosas malas de la enfermedad:
  • Esta debilidad que no deja dar más de dos pasos sin parecer una de las mascotas del Facebook que lleva 3 días sin comer.

  • La fiebre que me mata y me hace estar en el sofá.

  • No poder estar con mi abuelita.


Cosas buenas de la enfermedad:




  • Llevo una semana sin fumar.

  • Me ha adelgazado el culo.

  • He ido a "Nostra Señora dos Ollos Grandes"

4 Comments:

Anonymous lpvdm said...

Igual que la de Santiago está dedicada (o como coño quiera que se le llame a eso) al apóstol Santiago, la catedral de Lugo es la de Nosa Señora dos Ollos Grandes.

Es decir "señora" y hacer verdaderos esfuerzos por no continuar la frase con un "pur favuuuuuur, diniiiiiro para comeeeer".

6:53 AM  
Anonymous lpvdm said...

Se confirma que AEP es un bendito del cielo. Debería haberte echado a patadas de casa y dejarte en el descansillo del ascensor con una manta para que no le contagiases.

6:55 AM  
Anonymous Ra said...

La cosa más bonita del mundo es que alguien te sujete la frente mientras vomitas. Sienta de maravilla, y eso es amor.

9:24 AM  
Anonymous jo said...

Yo quiero un AE

3:33 AM  

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